Prawda, J. (1989). Sistema Educativo Mexicano. Logros, Inequidades y Retos del Futuro Sistema Educativo Mexicano. (pp. 17 – 36). México: Ed. Grijalva.
El problema expuesto en
el capítulo se resume a las definiciones de conceptos que desde siempre han
servido como tronco del Sistema Educativo Mexicano, agregando además cifras y
cantidades que hacen referencia a la evolución de la la educación en este país,
como los índices de alfabetismo, los matriculados en los distintos niveles,
etc. A esto se suman los datos de las fundaciones que apoyan la educación y que
vigilan la calidad y los centros en donde la educación es impartida. Asimismo
son tomados años representativos de la historia mexicana en donde se expone el
surgimiento de instituciones educativas, de cultura, etc. así como también la
creación de las dependencias de gobierno que vigilan y regulan todo el proceso
educativo de México.
De entre todo, podemos
rescatar conceptos como Sistema Educativo Mexicano, siendo éste el más
importante, y que el autor define como “el conjunto de normas, instituciones,
recursos y tecnologías destinadas a ofrecer servicios educativos y culturales a
la población mexicana” (17).
Uno de los datos más
importantes es la cantidad, no se si es grande o pequeña para el momento, de alumnos,
docentes y escuelas para finales de los años 80 en nuestro país: “se habla de
un total de más de 25 millones de alumnos, instruidos por un más de un millón
de docentes en cerca de doscientas mil
escuelas”. (Dirección General de Programación, SEP, 1988: 23).
La teoría es presentada
en un cierto orden cronológico, donde se hace referencia al proceso evolutivo
de la educación en nuestro país, todas las reformas y derechos que ésta otorga
y las dependencias que para su control han surgido, como la Secretaría de
Educación Pública.
El autor hace referencia,
en última instancia, al futuro, futuro que para nosotros hoy es presente, y
mueve al lector a reflexionar y a pensar en si todo ha valido la pena, además
de concientizar lo que debe hacerse para llevar a México a un lugar de oro, al
menos en educación.
Gamaliel
Martínez Báez

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